MICHELÁNGELO
MERISI CARAVAGGIO. (Localidad
cerca a Milán, 1571,
DAVID CON LA
CABEZA DE GOLIAT. 1609-1610,
Porto Ercole).
Roma, Galería Borghese.
Supone una de las
últimas realizaciones del pintor milanés, si no, la última, según
investigaciones. El tenebrismo y tristeza que evoca la obra hacen referencia a
los últimos oscuros años de su vida. La pintura formaba parte de la colección
del Cardenal Scipione Borghese.
El absoluto
naturalismo que impregna la obra se manifiesta en el espacio compositivo así
como en el tema central del pasaje bíblico. Sobre un fondo totalmente oscuro,
carente de objeto o figura en penumbra, presenta al joven David con el triunfo
victorioso de la cabeza del gigante Goliat. En tonalidades marrones, negros,
blancos y plata sucia, y una iluminación que procede del lado derecho del
personaje vencedor, combina los volúmenes del cuerpo de David con la cabeza
repugnante del vencido, en cuya frente advertimos que fue derribado por una
piedra de la horda del muchacho. La composición, basada en diagonales, el brazo
derecho que porta la espada y el izquierdo, con la vertical de la mano de David
y la cabeza de Goliat, se cruzan y enlazan con la diagonal que marca el muslo
derecho del vencedor, manifiestan la maestría de Caravaggio como padre absoluto
del naturalismo. Elementos bellos, como es el cuerpo de David y elementos
grotescos, repugnantes, como es la cabeza degollada del gigante, que demuestra
horror y espanto, a la que David contempla de manera compasiva y lejos de la
soberbia.
Sobre ambas imágenes se ha indagado en la
propia personalidad de Caravaggio, no obstante su prodigiosa maestría, era pendenciero
y de vida rocambolesca, y probablemente
esa propia cabeza sea el autorretrato del final de sus días. Y el joven David,
apuesto y brillante su Caravaggino, que
igualmente retrata en muchas de sus obras. Quizá ese tenebrismo pueda ser
imagen y transposición del propio interior del pintor. En la espada que porta
David se vislumbra una inscripción abreviada “H-AS OS, “La humildad mata la
soberbia”, máximas muy acordes con la predicación de la Contrarreforma.
De Michelangelo
Merisi “Il Caravaggio” existe otra muestra en el Museo del Prado de nuestra
capital. Ésta es “David vencedor de Goliat”, fechada hacia 1600. Que muestra un
momento que no tiene antecedentes ni se menciona en el relato bíblico, al
representar a David atando los cabellos del gigante para mostrar el trofeo a
las tropas israelitas. El naturalismo es evidente en la obra. Es una
composición monumental basada en dos diagonales y una vertical alineada con
ambas cabezas e introduciendo al espectador en un primer plano, donde los
escorzos, la iluminación y la penumbra, el bello cuerpo del muchacho la fealdad
de la cabeza de Goliat se contraponen marcando esa línea natural fiel reflejo
de la realidad.
Il
Caravaggio, máximo representante del llamado naturalismo-tenebrista marcó
el hito en la reacción contra el academicismo, el manierismo, siendo el polo
opuesto de la llamada “Escuela de Bolonia” representada por los hermanos
Agostino y Annibale Carracci y de su primo Ludovico, reconquistando la
vertiente clasicista “il vero naturale”
otorgando plena libertad al creador. Por el contrario con su naturalismo, la
imitación de la naturaleza –la mimesis-, revolucionó el arte de la
representación pictórica. Su naturalismo llevó a la cumbre la representación de
momentos emocionantes y culminantes de las Sagradas Escrituras, en fiel concordancia
con el mensaje tridentino, reduciendo los elementos a lo mínimo, y mostrando el
momento culmen del mensaje. El tratamiento de la luz, la penumbra, lo bello y
la fealdad, las representaciones “vulgares” de la virgen o santos, del mismo
Cristo, también le ocasionaron duras críticas y detractores. Y Aunque la obra
de Caravaggio no creó escuela propiamente, sí dejó escasos pero grandes
seguidores que nutrieron a la Iglesia y al poder de bellas, dramáticas y
patéticas, sensibilidad y asco, composiciones como símbolos de los mensajes de
la Contrarreforma (Véase como ejemplo
Daniele Crespi, La Piedad, Madrid Museo del Prado, h. 1626).
MDGZ, HISTORIA DEL
ARTE. UNED.
David, vencedor de Goliat h. 1600. Óleo sobre lienzo 110cm.x95cm. Museo del Prado. |